Trabajo colaborativo
Hoy en día, el trabajo colaborativo es esencial en
cualquier lugar de aprendizaje, ya que el que aprende se forma como persona y
pone en práctica sentimientos y
afectividad en el desarrollo de la mente.
Esta consideración es coherente con la
afirmación de que la esencia educativa, la esencia del desarrollo de la
capacidad mental de los seres humanos, es el proceso de socialización.
Por
lo tanto, entendemos la socialización como un proceso de desarrollo de la
persona en formación que se da en grupo.
Parecería
que todo el proceso de enseñanza se concentra en una transmisión del
conocimiento, en una transferencia de información. Sin embargo la construcción
del conocimiento es un proceso de adecuación de mentes. Esto nos hace reflexionar
sobre los procesos a través de los cuales nuestros alumnos aprenden. Si la
comunicación con el grupo desarrolla la mente de la persona, fomenta las
habilidades de trabajo en grupo y responde a la forma de trabajo que se prevé
será utilizada en los próximos años, entonces los procesos educativos tendrán
que dar un giro, y pasar de la consideración del aprendizaje individual, al
aprendizaje en grupo.
Entendiendo el aprendizaje colaborativo
El
desarrollo del aprendizaje colaborativo se refiere a la actividad de pequeños
grupos desarrollada en el salón de clases. Aunque el trabajo colaborativo, no
es solo formarse en equipos; los alumnos, una vez recibido las instrucciones
del maestro, estos se forman en equipos para intercambiar información y
trabajan con una tarea hasta que todos los integrantes del equipo la hayan
entendido y terminando, aprendiendo a partir de la colaboración.
Comparando
los resultados de esta forma de trabajo, con modelos de aprendizaje
tradicionales, se ha encontrado que los estudiantes aprenden más cuando
utilizan el AC (aprendizaje colaborativo), recuerdan por más tiempo el
contenido, desarrollan habilidades de razonamiento superior y de pensamiento
crítico y se sienten más confiados y aceptados por ellos mismos y por los demás.
La transformación en el aula a través
del AC.
Lo
que anteriormente era únicamente una clase, hoy en día se ha vuelto un foro
donde los alumnos y maestros comparten e intercambian ideas para forjar una
meta común.
En
los salones de clase de AC, las actividades están estructuradas de manera que
los estudiantes se expliquen mutuamente lo que aprenden. Algunas veces a un
estudiante se le asigna un rol específico dentro del equipo. De esta manera
ellos pueden aprender de sus puntos de vista, dar y recibir ayuda de sus
compañeros de clase y ayudarse mutuamente para investigar de manera más
profunda acerca de lo que están aprendiendo.
Los
elementos que siempre están presentes en este tipo de aprendizajes son:
·
Cooperación:
Los estudiantes se apoyan mutuamente para cumplir con un doble objetivo: lograr
ser expertos en el conocimiento del contenido, además de desarrollar
habilidades de trabajo en equipo. Los estudiantes comparten metas, recursos,
logros y entendimiento del rol de cada uno. Un estudiante no puede tener éxito
a menos que todos en el equipo tengan éxito.
·
Responsabilidad. Los
estudiantes son responsables de manera individual de la parte de tarea que les
corresponde. Al mismo tiempo, todos en el equipo deben comprender todas las
tareas que les corresponden a los compañeros.
·
Comunicación. Los miembros del equipo intercambian información importante materiales,
se ayudan mutuamente de forma eficiente y efectiva, ofrecen retroalimentación
para mejorar su desempeño en el futuro y analizan las conclusiones y reflexiones
de cada uno para lograr pensamientos y resultados de mayor calidad.
·
Trabajo en equipo. Los estudiantes aprenden a resolver juntos los problemas,
desarrollando las habilidades de liderazgo, comunicación, confianza, toma de
decisiones y solución de conflictos.
·
Autoevaluación. Los
equipos deben evaluar cuáles acciones han sido útiles y cuáles no. Los miembros
de los equipos establecen las metas, evalúan periódicamente sus actividades e
identifican los cambios que deben realizarse para mejorar su trabajo en el
futuro.
Evaluando los aprendizajes.
¿Cómo evalúo el trabajo en equipo?
Las
actividades de AC comúnmente tienen varios objetivos, incluyendo aprendizaje
individual, el éxito en el funcionamiento del equipo y un producto
colaborativo. Debido a que el apoyo a los compañeros para aprender el material
es responsabilidad principal de cada estudiante, la colaboración y valoración
individual son dos requerimientos de evaluación en casi todos los proyectos.
Esto incluye participación en clase, asistencia, preparación individual y
cooperación, lo que incluye ayudar a los demás a aprender el material del
curso.
Un
rol importante del profesor es observar y monitorear a los grupos.
Observar
a los grupos de estudiantes permite a los profesores entender la calidad de
cada interacción del equipo y de su progreso en la tarea. Cuando observe a los
equipos en clase, busque ejemplos de escucha con atención, discusión seria y
progreso hacia el logro de un objetivo común con la colaboración de cada uno de
los miembros del equipo.
Utilice
la tecnología para llevar un registro de las actividades individuales y de
grupo. El uso de correo electrónico o programas computacionales de aprendizaje
pueden ser utilizados para comunicar el progreso, planes y decisiones al
profesor. El monitoreo de equipos que se reúnen fuera de clase puede ser
realizado con base en reportes grupales de avance, minutas de las juntas,
avances entregados durante el proyecto. Algunos profesores les piden a sus
alumnos que entreguen reportes periódicos para verificar que el equipo cumple
con el plan de trabajo y esté progresando a través de la unidad y cooperación
de los integrantes.
Tienen distintas responsabilidades pero
compartiendo el mismo objetivo; formar números de cuatro cifras, utilizando
distintos colores para identificar las posiciones (unidad, decena, centena,
unidad de millar).
Alumnos
del tercer grado grupo B.
No hay comentarios:
Publicar un comentario